ENTREVISTAS - Matthew Dyson: "Hay razones de peso para temer que la salida de Reino Unido de la
Jacob Leask
Laura Sanchez de la Sierra
Rosario Grimá Algora
Sandra Sáez Moreno
Dr. Matthew Dyson es profesor de Derecho en Trinity College, Cambridge University. Doctorado en Derecho por esa misma universidad y vicepresidente de la “European Society for Comparative Legal History”, se mueve principalmente en los campos del Derecho Romano, el Derecho de la Unión Europea, el Derecho Comparado y la Historia del Derecho. Actualmente se encuentra inmerso en diferentes proyectos que se centran en la evolución y el desarrollo del Derecho y la norma jurídica, pero además compagina su trabajo como investigador con su colaboración en diferentes revistas como “GLOSSAE, European Journal Of Legal History” (en la cual es parte del Consejo Asesor Internacional).
Desde Ágora hemos tenido la gran oportunidad de entrevistar a Matthew Dyson sobre el resultado del referéndum que tuvo lugar el pasado 23 de junio y dejó a toda Europa boquiabierta: el Brexit, una de las brechas más importantes en la historia de la Unión Europea. El Dr. Dyson no sólo aporta el punto de vista de un experto en el campo, sino el de un ciudadano británico, lo que nos permite gozar de la pluralidad de perspectivas y realidades que tanto nos gusta y de la que siempre presumimos en Ágora.
I - CUESTIONES POLÍTICAS
PREGUNTA: Lord Hill, el comisario británico en la UE, dimitió tras el resultado del referéndum. No obstante, hay muchos/as nacionales británicos/as trabajando en las instituciones europeas. ¿Podrán continuar trabajando en ellas?
RESPUESTA: A largo plazo, esto dependerá de las condiciones bajo las cuales el Reino Unido deje la UE (asumiendo que lo hace). Temporalmente, serán los/as propios/as trabajadores/as quienes decidan por sí mismos/as si desean continuar trabajando.
P: ¿Y qué sucederá con la presidencia británica del Consejo en el segundo semestre de 2017, que coincidirá con las negociaciones del Brexit (si efectivamente se activa el artículo 50 del TUE a finales del 2016)?
R: Resulta pertinente que nos preguntemos, incluso en el supuesto de que el artículo 50 no haya sido activado antes de que Reino Unido presida el Consejo, si deberá rechazar asumir este papel, pasando la presidencia al siguiente país en la lista. Se debería tomar esta decisión cuanto antes a la vista del número de gestiones previas que tiene que realizar el país que asume la presidencia del Consejo.
* El día 19 de julio, la primera ministra británica Theresa May anunció al presidente del Consejo Donald Tusk que Reino Unido no asumirá la presidencia de dicha institución en el segundo semestre de 2017. El siguiente país que debería asumir la presidencia es Estonia. Más información en “Politico.eu”
"No cabe ninguna duda de que las nuevas relaciones de poder en la Unión Europea van a ser particularmente interesantes y difíciles al mismo tiempo".
P: Reino Unido siempre se ha mostrado contrario a cualquier medida proteccionista en la Unión Europea (por ejemplo, en el caso de la industria de acero). Tras su salida, este aspecto no será un elemento a tener en cuenta en los procesos legislativos de la UE. ¿Cómo garantizará la UE su apertura al comercio y evitará medidas proteccionistas sin la presencia del Reino Unido insistiendo en este aspecto?
R: Parece haber una suposición de que la apertura al comercio es inherentemente positiva, lo que en sí es cuestionable. En cualquier caso, no cabe ninguna duda de que las nuevas relaciones de poder en la Unión Europea van a ser particularmente interesantes y difíciles al mismo tiempo.
P: ¿Cree probable que la relación entre Escocia, Gales, Irlanda del Norte e Inglaterra cambie tras la activación del artículo 50 TUE?
R: Existe un riesgo importante de que estas relaciones se compliquen. Gales votó por dejar la UE, a pesar de la cantidad de dinero que ha recibido de los fondos de la UE. Irlanda del Norte y Escocia claramente votaron por quedarse, de la misma forma que lo hicieron Cambridge, Oxford, Londres y, como era de esperar, Gibraltar. El Partido Nacional Escocés (SNP), que actualmente está en el poder, ya ha intentado mantener la máxima relación posible con la UE, e incluso están hablando de convocar un nuevo referéndum.
El proceso de paz de Irlanda del Norte estableció una línea sin fronteras entre el Eire e Irlanda del Norte y este asunto tendría que ser resuelto en caso de salida de la UE. Por otro lado, también ha habido iniciativas españolas para ofrecer una soberanía conjunta sobre Gibraltar, cuestión que por sí misma ya encierra ciertas dificultades. Aunque los políticos conservadores digan lo contrario, la situación territorial de Reino Unido es mucho más complicada ahora. Hay razones de peso para temer que la salida de Reino Unido de la UE signifique también el fin de Reino Unido.
First published in The International New York Times, June 28, 2016 | By Chappatte
http://www.politico.eu/interactive/brexit-european-union-referendum-commission-david-cameron-leave-cartoons-draw-brexit-divorce/
P: En su momento se señaló que la participación de los votantes jóvenes sería decisiva para evitar el Brexit. De hecho, el 75% de los jóvenes entre 18 y 24 años votaron a favor de que Reino Unido continuase en la UE. Sin embargo, los niveles de participación de este colectivo fueron muy bajos. ¿Cuáles son las razones que explican esta baja participación?
R: Es complicado saberlo, pero no me parece que los jóvenes en Reino Unido hayan acudido a las urnas en este referéndum en menor proporción que los jóvenes de otros países de similares características. Eso sí, hay una sensación de que no se escucha a los jóvenes, que conduce a su vez a un sentimiento de desánimo ya que ni siquiera se les da la opción de intentar participar. También algunos jóvenes, como los estudiantes, tuvieron problemas para registrarse para votar, algo que a priori parece una tarea bastante simple de realizar.
"La clase trabajadora (si es que éste es o ha sido alguna vez un término apropiado) es la que más afectada y en peligro se vería si saliésemos de la UE".
P: El resultado del referéndum ha sacado a la luz un problema más profundo que afecta a Reino Unido: una clase trabajadora enfadada y alienada. Algunos autores (como Owen Jones) han descrito el Brexit como una revuelta de la clase trabajadora. ¿Usted comparte este punto de vista?
R: No, no entiendo el debate simplemente en términos de clase trabajadora vs. otros. Sería muy triste si así fuese, puesto que la clase trabajadora (si es que éste es o ha sido alguna vez un término apropiado) es la que más afectada y en peligro se vería si saliésemos de la UE.
P: La mayoría de la población británica, incluidos los votantes a favor del Bremain, mostró una actitud crítica en contra de la UE, señalando principalmente el déficit democrático en las instituciones europeas. Teniendo esto en cuenta, si la UE hubiese hecho intentos de abordar este problema, ¿cree que el resultado del referéndum habría sido diferente?
R: Es difícil responder. La calidad del debate en Reino Unido ha sido tan pobre que la realidad de lo que efectivamente hace o no hace la UE no ha sido realmente una cuestión importante. La UE se ha “democratizado” desde principios de los años 90, y en particular tras el Tratado de Lisboa, pero ello también depende de qué formas de democracia cada uno considere más importantes. La UE no tiene una Cámara Alta que no es elegida y que incluye 8 figuras religiosas, como ocurre en Reino Unido. En las elecciones al Parlamento de Reino Unido, no marcan ninguna diferencia ni los votos en safe seats* (asientos asegurados) ni aquellos que sobrepasan el umbral de la mayoría simple. Y ello no sucede con el sistema de representación proporcional que se utiliza para elegir el Parlamento europeo. Por lo tanto, aunque en ocasiones las posturas que adoptan algunos funcionarios de la UE son poco constructivas, lo que verdad supone en sí un problema importante es la falta de implicación significativa para entender lo que es realmente la UE.
* El concepto safe seats hace referencia a aquellas circunscripciones en las que, teniendo en cuenta el resultado de elecciones previas, un partido tiene la certeza de que su candidato será elegido. Y ello en tanto en cuanto las circunscripciones no han sido modificadas desde los años sesenta en Reino Unido y que los votantes suelen decantarse por el mismo partido a lo largo del tiempo. Más información en el artículo de la BBC “Election 2015: Does every vote matter in a parliament with so many safe seats?".
"La UE se ha “democratizado” desde principios de los años 90, y en particular tras el Tratado de Lisboa, pero ello también depende de qué formas de democracia cada uno considere más importantes".
II - CUESTIONES LEGALES
P: ¿Tienen que respetar los miembros del Parlamento el resultado del referéndum? ¿Existe algún precedente al respecto? En caso de que no, ¿podría generarse un nuevo precedente, según el cual el resultado de un referéndum válido tenga efectos vinculantes para el Parlamento?
R: El resultado del referéndum no es vinculante para el Parlamento. Son las leyes que regulan cada referéndum las que determinan cuáles son los efectos jurídicos que se derivan de su resultado; y en este caso no se estipuló que el resultado tuviese un carácter vinculante. En efecto, como los referéndums no son parte del sistema de democracia representativa británico, las leyes que los convocan son las que se encargan de determinar su procedencia y su uso; y de ello resulta que, en la práctica, la celebración de referéndums no sea muy frecuente. Antes de éste, sólo había habido dos referéndums a nivel nacional.
El primero fue el referéndum para la Comunidad Económica Europea (CEE) en 1975, en el cual hubo un 67% de votos a favor de permanecer en la UE (de un total de 65% de participación): su carácter era también meramente consultivo, pero no fue necesario realizar ningún cambio en la legislación ya que el voto estaba a favor del statu quo. El segundo referéndum nacional fue el Alternative Vote Referendum (referéndum por el voto alternativo), que obligaba al Parlamento británico a adaptar la legislación pertinente si resultado estaba a favor de cambiar el sistema ‘first-past-the post’ (de mayoría simple) por un sistema alternativo de elecciones (ver el Parliamentary Voting System and Constituencies Act 2011, s. 8). Claramente, el Parlamento podría haber optado por otorgar un carácter vinculante a este referéndum, o con consecuencias inmediatas sobre otras instituciones, si hubiese querido. Sería muy sorprendente que se considerase que el resultado de este referéndum es vinculante a partir del caso de un sólo referéndum (el Alternative Vote Referendum). Por supuesto, este es sólo el punto de vista legal. En la práctica, puede ser difícil desde un punto de vista político actuar de manera contraria al margen de 4 puntos porcentuales que se mostró a favor del Brexit.
"Sería muy sorprendente que se considerase que el resultado de este referéndum es vinculante a partir del caso de un sólo referéndum".
El único precedente ampliamente reconocido en este momento es que el Parlamento escocés normalmente tendría que otorgar una moción de consentimiento para que el Parlamento de Westminster legislase sobre un asunto descentralizado. El Parlamento de Westminster es soberano, pero según este precedente no puede legislar sobre asuntos transferidos al Parlamento escocés sin su consentimiento.
Existen fuertes motivos para pensar que, para retirarse de la UE, es necesario aprobar ciertas leyes, aunque quizás esto no sea necesario para activar el artículo 50. No obstante, la Ley de las Comunidades Europeas de 1972* tendría que ser derogada antes de que Reino Unido pudiese efectivamente ‘abandonar’ la UE. Por lo tanto, si el Parlamento escocés no otorga dicha moción de consentimiento, el Parlamento de Westminster podría aprobar aquellas leyes necesarias para retirarse de la UE, pero estaría violando un precedente. Esto no tendría consecuencias legales inmediatas excepto, quizás, cuestionar los fundamentos del precedente mismo, pero en todo caso se derivarían, muy probablemente, consecuencias políticas significativas. Los políticos nacionalistas escoceses podrían intentar negociar la aprobación de la moción de consentimiento a cambio de la aprobación de leyes que faciliten la celebración de otro referéndum sobre la independencia escocesa (tras el voto 55-45 a favor de permanecer como parte de Reino Unido en 2014).
* La Ley European Communities Act 1972 regula la relación entre el Derecho de la Unión Europea y el Derecho inglés. Y entre los aspectos que regula está el reconocimiento del principio de primacía del Derecho de la Unión Europea sobre el Derecho nacional. Más información en la página de la House of Commons.
First published in The Minneapolis Star Tribune, U.S., June 28, 2016 | By Steve Sack
http://www.politico.eu/interactive/brexit-european-union-referendum-commission-david-cameron-leave-cartoons-draw-brexit-divorce/
P: Algunos autores ingleses (Barber, Hickman, King y el Blog de Derecho Constitucional “UK Constitutional Law Association Blog”) han mantenido que el Gobierno de Reino Unido no tiene entre sus competencias la posibilidad de activar el artículo 50 del TUE tras el resultado del referéndum. ¿Debe el Parlamento británico aprobar una ley que otorgue dicha competencia al ejecutivo?
R: En efecto, en estos momentos hay un debate legal sobre si el Parlamento británico tendría que actuar antes de iniciarse el procedimiento del artículo 50 TUE. También está la cuestión sobre si el artículo 50 es el único mecanismo existente que permite a Reino Unido retirarse de la UE (aunque quizás sea el más probable). En términos generales, la ejecución de un tratado internacional es una prerrogativa del poder ejecutivo (“the exercise of a prerogative”)* y no del Parlamento. La cuestión radica en si dicha competencia ha sido delimitada en concreto por una ley. Y este aspecto no está del todo claro a priori, e incluso se trata de una decisión de gran dificultad para un tribunal. Como es sabido, Reino Unido carece de una constitución escrita y, por consiguiente, de un Tribunal Constitucional; por lo que, como en otros países, es el Tribunal Supremo quien tiene la última palabra a través del procedimiento de la revisión judicial (“Judicial Review”).
* Hemos decidido traducir el término inglés “prerogative” por la palabra prerrogativa. No obstante, es importante hacer una aclaración. En el Derecho inglés, las prerrogativas permiten al gobierno actuar en determinadas áreas sin necesidad de que haya una ley previa del Parlamento que otorgue dicha competencia al ejecutivo. Y ello en tanto que es el Monarca el que ejerce el poder (y hoy en día el gobierno lo ejerce en su nombre). Las prerrogativas son muy relevantes en el campo de las relaciones internacionales ya que permiten al ejecutivo dirigir su política exterior sin necesidad de que haya una legislación previa que le permita firmar un tratado, por ejemplo. No obstante, el ejecutivo debe rendir cuenta en el Parlamento cuando hace ejercicio de sus prerrogativas.
"Se podría pedir al TJUE que se pronunciase acerca de si los/as ciudadanos/as británicos/as, que actualmente tienen ciudadanía de la UE, pueden ser despojados de ésta; o si el artículo 50 permite a un Estado dar marcha atrás tras haber notificado su retirada sobre la base de dicho artículo"
P: El artículo 50 del TUE permite a todo Estado Miembro retirarse de la UE ‘de conformidad con sus normas constitucionales’. ¿Cómo de posible es un escenario en el que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea tuviese que pronunciarse acerca de si Reino Unido ha actuado de acuerdo con su Constitución?
R: Teóricamente es posible, pero el TJUE ha reiterado en varias ocasiones que los tribunales nacionales se encuentran en una mejor posición realizar este tipo de análisis. Se podría pedir al TJUE que se pronunciase acerca de si los/as ciudadanos/as británicos/as, que actualmente tienen ciudadanía de la UE, pudieran ser despojados de ésta; o si el artículo 50 permite a un Estado dar marcha atrás tras haber notificado su retirada sobre la base de dicho artículo. De hecho, hay muchas preguntas difíciles y no está claro cuál es la respuesta que se puede dar a cada una de ellas. El hecho de que los partidarios de la salida de la UE no hayan hecho propuestas (post-Brexit) coherentes, y que ni siquiera hayan sido capaces de acordar (conjuntamente) las prioridades, es un ejemplo notable de la dificultad de este tema.
P: Tras la salida de Reino Unido de la UE, esta legislación deberá reemplazarse por nuevas leyes aprobadas por el propio Parlamento británico. ¿Se seguirá aplicando la legislación de la UE en Reino Unido tras su salida o “se congelará su eficacia” desde el momento en el que se haga efectiva su salida? En el caso de que la legislación de la UE continúe en vigor hasta la aprobación de las correspondientes leyes nacionales, ¿se aplicarán los sucesivos cambios legislativos que introduzca la UE en la legislación existente o el TJUE en sus sentencias?
R: Tras la salida de la UE, lo más probable es que aquellas leyes que el Parlamento de Westminster haya aprobado con anterioridad continúen en vigor hasta que sean revisadas. Sin embargo, es posible que los reglamentos o leyes europeas directamente aplicables dejen de estar en vigor. Pero la verdad es que no sabemos lo que sucederá. No resulta probable que, tras la salida de Reino Unido, las nuevas leyes aprobadas por la UE modifiquen las existentes o que se apliquen las sentencias de los tribunales de la UE.
ENGLISH VERSION
Dr Matthew Dyson (phd Cambridge University) is a Fellow in Law at Trinity College, Cambridge, specialising in comparative legal history, particularly of criminal law and tort law, and Vice-President of the European Society for Comparative Legal history. Currently, he is involved in several projects that focus on the development of legal rules; in addition to being a legal researcher, he contributes to several journals such as “GLOSSAE, European Journal Of Legal History”, in which he is on the International Advisory Board.
Agora have had the honour to interview Matthew Dyson on the outcome of the referendum that took place the 23 of June and that has shocked the EU: the Brexit, one of the most important “divorces” in the history of the European Union. Not only is Dr. Dyson an expert in this issue, but as British citizen, he also enhances our commitment to pluralism of views, a core principle in Agora that we are always proud of.
I - POLITICAL SCIENCES ISSUES
AGORA REVISTA ONLINE: Lord Hill, the UK’s European commissioner, felt the need to resign in the wake of the referendum result. However, there are many more UK nationals employed in the European institutions. Will they be able to continue working there?
MATTHEW DYSON: In the long term, that depends on the terms by which the UK leaves the EU (assuming it does). In the interim, individual employees would have to decide for themselves whether they wanted to remain.
A: And will the UK hold the presidency of the Council in the second half of 2017, that will likely coincide with Brexit negotiations (if art. 50 is triggered)?
M: It seems plausible that even if art. 50 has not been triggered before the UK holds the presidency of the Council, it would be realistic to ask whether the UK should decline to take up its role, leaving the position to pass to the next country in line. The sooner a decision on that could be made, the better, as significant preparation by the country to chair the Council will be required. (It has been recently published that the UK will relinquish the EU presidency in 2017. More information on this issue, consult Politico.eu).
"The new power relationships within the EU are going to be particularly interesting and difficult."
A: British reluctance to approve protectionist measures in the EU (e.g. in the case of the steel industry) will no longer play a part in EU policy making, and may make such measures more common. How can the EU ensure its openness to trade and avoidance of and protectionism without the UK advocating for these?
M: There appears to be an assumption that such openness is an inherently and consistently good thing, which is open to doubt. In any case, the new power relationships within the EU are going to be particularly interesting and difficult.
"There are strong grounds for the fear that the UK leaving the EU will also mean the end of the UK."
A: Is it likely that the relationship between Scotland, Wales and North of Ireland and England would change after the UK activates art 50?
M: There is a significant risk that such relationships could be more difficult. Welsh districts voted to leave the EU, despite the large sums of support they have received from EU funds. Norther Ireland and Scotland clearly voted to remain, as did, interestingly, Cambridge, Oxford, London and unsurprisingly, Gibraltar. The Scottish National Party who lead the Scottish Government have already sought to retain as much of a connection to the EU as possible, and are talking again of seeking a referendum.
The Northern Irish Peace Process has involved an effectively borderless line between Eire and Northern Ireland, and this would have to be addressed in any exit from the EU. There have also already been Spanish moves to offer joint sovereignty over Gibraltar, which raises significant difficulties in itself. While Conservative Politicians might argue otherwise, the devolved and territorial status of the UK is much more difficult now. There are strong grounds for the fear that the UK leaving the EU will also mean the end of the UK.
"It is not clear to me whether the young in Britain voted less than the young in other comparable countries do."
A: It was suggested that the young voters turnout was decisive to avoid the Brexit. 75% of the youngster between 18-24 years old voted Bremain, However their overall turnout was very low. What are the reasons behind this low turnout?
M: It is hard to say, and it is not clear to me whether the young in Britain voted less than the young in other comparable countries do. There is some sense that the young are rarely listened to, leading to despair about even trying to be heard. There are also problems about how some, such as students, manage to register to vote when they are not sufficiently organized even for this relatively simple task.
"The working class (if that is or ever was an appropriate term) are the ones who will be most at risk from leaving the EU."
A: The outcome of the referendum has proven a much deeper problem that the UK has: an angry and alienated working class. Some authors (i.e. Owen Jones) have described the Brexit as a working class revolt. Do you agree with this?
M: No, I don’t see the debate simply in terms of working class vs. others. It would be a very sad thing if it were, since the working class (if that is or ever was an appropriate term) are the ones who will be most at risk from leaving the EU.
"The EU has become more democratic since the early 1990s, and in particular, post Lisbon, but it does depend on what forms of democracy you think are more important."
A: A majority of British population, even Bremain voters, showed a critical attitude against the EU, mainly pointing at the “democratic deficit” within the European institutions. Provided this fact, had the EU made any attempts to address this “democratic deficit”, would have the outcome of this referendum been different?
M: It is hard to say. The quality of the debate in the UK was so poor that the reality of what the EU does was not really in issue. The EU has become more democratic since the early 1990s, and in particular, post Lisbon, but it does depend on what forms of democracy you think are more important. The EU does not have an unelected upper chamber, including 8 religious figures, as the UK does. In an election to the UK Parliament, votes in “safe” seats do not make a difference, nor do those beyond the ‘first-past-the-post’ threshold, which is not a problem for the proportional representation of the European Parliament. So, while there are sometimes unhelpful positions adopted by EU officials, the lack of any meaningful engagement with the evidence of what the EU is seems to have been a significant problem.
II - LEGAL ISSUES
A: Do Members of the UK Parliament have to respect the outcome of the referendum? Is there a convention on this issue? if not, is it likely that a new convention (the outcome of a valid referendum is binding on the parliament) will be originated?
M: Parliament is not legally obliged to follow the referendum result. The legal obligations flowing from the outcome of the decision are set out in Legislation and no obligations were set out there. Indeed, as referendums are not part of the British form of representative democracy, they take place through legislation and are rare. Prior to this there had been only two nationwide referendums.
The first was the EEC referendum in 1975, by which there was a 67% vote (on a 65% turnout) for remaining in the EU: it was also advisory, but no change was required as the vote was in favour of the status quo. The second national referendum was the Alternative Vote Referendum which obliged Parliament to act if the referendum was in favour of changing from a ‘first-past-the-post’ system, to an alternative vote system of election (see Parliamentary Voting System and Constituencies Act 2011, s. 8). Clearly, Parliament could have made the referendum binding on the government, or with immediate consequences on other bodies, if it had wished. It would be very surprising if a convention to treat referendums as binding was created by one referendum. Of course, that is the legal view. In practice, it might be politically difficult to act in a way contrary to the 4 percentage point margin in favour of Brexit.
"Nationalist Scottish politicians might seek to trade the motion of consent for legislation on another referendum on Scottish independence (after the 55-45 vote in favour of remaining part of the UK in 2014)."
The only convention widely recognized at the moment is that the Scottish Parliament would normally need to give a motion of consent for the Westminster Parliament to legislate on a devolved matter. The Westminster Parliament is sovereign but by convention, does not legislate on matters devolved to the Scottish Parliament without that Parliament’s consent. There is a strong case that legislation would be required to leave the EU, though triggering Article 50 itself may or may not. nonetheless the European Communities Act 1972 would need to be repealed by legislation before the UK meaningfully ‘leaves’ the EU. Thus, if the Scottish Parliament declined to pass such a motion of consent, the Westminster Parliament could still enact legislation to leave the EU, but to do so would be in breach of a constitutional convention. That has no immediate legal consequences, other than, perhaps, to shake the foundations of the convention itself, but there would likely be significant political consequences. Nationalist Scottish politicians might seek to trade the motion of consent for legislation on another referendum on Scottish independence (after the 55-45 vote in favour of remaining part of the UK in 2014).
A: It has been suggested (Barber, Hickman, and King, UK Constitutional Law Association Blog) that there is no legal power for the UK Government to trigger Article 50 TEU on the basis of the result of the referendum. Must the UK Parliament therefore pass legislation providing such a power?
M: There is significant legal debate about whether Parliament would have to act before Art. 50 were triggered. There is also a question whether Art. 50 is the only mechanism by which the UK might leave the EU, though it is the most likely. Typically, exercising a treaty power is an exercise of the prerogative, as the action of the executive rather than Parliament. The issue is whether that prerogative power has been circumscribed by, in particular, Statute. The fact is, we cannot say for sure, and it would be a remarkably difficult decision for a court. As may be known, without a codified constitution, the UK also does not have a Constitutional Court as many other countries do so the Supreme Court would ultimately resolve any challenge by way of Judicial Review.
First published on Caglecartoons.com, Slovakia, June 30, 2016 | By Marian Kamensky
http://www.politico.eu/interactive/brexit-european-union-referendum-commission-david-cameron-leave-cartoons-draw-brexit-divorce/
"The CJEI might be called upon to decide whether UK citizens who currently enjoy EU citizenship can be stripped of it and whether art. 50 allows a state to withdraw that withdrawal notification under art. 50."
A: Article 50 TEU allows a Member State to decide to withdraw from the EU ‘in accordance with its own constitutional requirements’. Could this lead to a situation in which the CJEU is asked whether the UK has come to the decision in a constitutionally valid manner, for instance in infringement proceedings?
M: Theoretically that is possible, but the CJEU’s attitude has tended to be that national courts are best placed to make such an assessment. The CJEI might be called upon to decide whether UK citizens who currently enjoy EU citizenship can be stripped of it and whether art. 50 allows a state to withdraw that withdrawal notification under art. 50. In fact, there are lots of difficult questions, and it is unclear who can adjudicate many of them. The fact that those who campaigned to leave the EU did not come up with coherent possibilities, let alone agree their priorities, is quite remarkable.
A: After the UK leaves the EU, the EU legislation should be replaced by laws enhanced by the British Parliament. Will such EU law therefore continue be applicable in the UK after withdrawal and will the state of such legislation be ‘frozen’ on the date of withdrawal or will it likely be subject to amendment by the EU legislature and judgements by the CJEU?
M: Law enacted by the Westminster Parliament will most likely remain until the huge exercise to reconsider it after leaving the EU was complete. Other than that, one might assume that Regulations and other automatically in force rules might no longer be in force. But the truth is we simply don’t know. It does not seem likely that if the UK leaves the EU, any legislation directly from the EU will be updated or enforced automatically by courts of the European Union.